
¿Qué es la acupuntura facial?
La acupuntura facial es un tratamiento cosmético que complementa la acupuntura tradicional. Su objetivo es que la piel luzca más sana, joven y tersa. La acupuntura facial aborda los signos del envejecimiento y la salud general de la piel con el objetivo de rejuvenecerla.
Si bien el tratamiento se centra en el rostro, también se experimentan los beneficios generales de la acupuntura para la salud, como la relajación, la reducción de la ansiedad, el aumento del flujo sanguíneo y la salud óptima.
La acupuntura aumenta el flujo sanguíneo en una zona específica, lo que deja el rostro fresco y con un tono radiante. Además, reduce la tensión mandibular. La acupuntura facial busca reducir las líneas de expresión y arrugas, y mejorar la textura de la piel, logrando una apariencia más juvenil. También utiliza agujas corporales para corregir cualquier desequilibrio.

Proceso
Durante un tratamiento de acupuntura facial, el acupunturista insertará de veinte a treinta agujas diminutas e indoloras en el rostro. Al perforar la piel, las agujas crean pequeñas heridas, llamadas "microtraumas", que inician el proceso natural de curación del cuerpo. Este proceso aumenta el flujo sanguíneo, la producción de colágeno y estimula la producción de elastina, responsable de una mayor elasticidad de la piel.
Los tratamientos incluyen otras modalidades además de la punción, y pueden incluir cualquier combinación de gua sha facial, ventosas, masajes, sueros y mascarillas.
A diferencia del bótox o los rellenos dérmicos, la acupuntura facial no es una solución rápida: se requieren tratamientos semanales regulares para lograr cambios a largo plazo. Un estudio reveló que la mayoría de las personas notaron mejoras después de solo cinco tratamientos, pero se recomiendan diez tratamientos una o dos veces por semana para obtener resultados óptimos. Posteriormente, se recomienda un mínimo de una vez al mes para mantenimiento.



